Un año de La Real Hamburguesería
Creo que ya es seguro decir que las hamburguesas gourmet no son…
Foto: David Egui
Creo que ya es seguro decir que las hamburguesas gourmet no son una tendencia más, y que la oferta de esta nueva visión de la típica comida rápida americana se ha filtrado en cada rincón del mundo. Barcelona no se escapa de esta conquista. Puede conseguirse como parte del menú de espacios culinarios tradicionales y al menos en una decena de restaurantes especializados en ofrecer la mejor cara de este bocadillo. La Real Hamburguesería es un de ellos y este verano cumple su primer año en la ciudad.
Foto: David Egui
El proyecto no necesita mucha explicación: una hamburguesería de calidad, con una propuesta gastronómica clásica que no deja de ser atractiva e interesante, buen producto, sin pretensiones y donde el visitante disfrute comiendo con las manos. El mensaje está bastante claro desde la puerta, donde se lee el nombre del local entre dos manitos agarrando una hamburguesa.
Foto: David Egui
Como todo lo que se hace tendencia, hace unos años las hamburguesas gourmet se apoderaron del mundo. Y, en esa conquista, la necesidad de sus creadores de figurar las fue haciendo más y más elaboradas, complicadas y rebuscadas. En La Real Hamburguesería la idea inicial fue volver a lo clásico y partir de ahí. Seis entrantes, entre los que destacan sus nachos con chili con carne, guacamole y queso gratinado, que se han convertido en los favoritos de la ciudad, y los nuevos tequeños y patatas bravas, que se estrenaron con la nueva carta en celebración por su primer año, forman parte de la apetitosa carta.
Foto: David Egui
Entre los principales ofrecen nueve hamburguesas. Cinco de ellas hechas de 180gramos de picanha (un tipo de corte de carne de res que se encuentra en la parte posterior de la espalda), una vegana, una de pollo frito, una de 200gramos de vaca vieja y una de porkbelly. Las favoritas desde el comienzo han sido las cheesburger, clásica combinación de la picanha con lechuga, tomate, cebolla roja, pepinillos caseros y queso cheddar, con el toque especial que le agregan con su crema de queso cheddar curado. “La de Brie” con queso brie artesanal, mermelada casera de ruibarbo con cebolla, beicon crujiente y rúcula, y la de la casa, “La Real” con queso cheddar, beicon y crema de queso gratinado en cada cara del suave pan brioche que usan en todas sus hamburguesas. Con la nueva carta la llegada de “La de Raclette” ha sido todo un éxito. Una hamburguesa de 180gr de picanha con mayonesa de setas, cebolla caramelizada, pepinillos de la casa y una pacha llena del famoso queso suizo que llega derretido a la mesa y se voltea en la hamburguesa, convirtiéndose en el típico momento “instagrameable” de la cena.
Foto: David Egui
También ofrecen dos tipos de hot dogs en su propuesta y una lista de extras con los que se pueden personalizar las hamburguesas. ¿Para acompañarlas? Patatas fritas clásicas, patatas onduladas con pimienta, aroma de trufa y crema de queso parmesano, patatas bravas o ensalada verde. Y para beber trabajan en conjunto a una cervecería artesanal de la ciudad llamada Edge Brewing y ahora ofrecen una carta de cocteles y tragos para el verano como tinto de verano, sangría, moscow mule o aperol spritz.
Todo este banquete debe terminar con un postre igual de foodporn, y en La Real lo tienen. Brownie con helado de pistachos, batidos o merengadas de diferentes sabores, pie de limón y el favorito: la galleta de chispas de chocolate rellena de nutella, con o sin helado es el cierre perfecto para un día en el que las porciones pequeñas y los menús de degustación quedan de lado y el confort food manda.
