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Ernesto Neto despliega talento en Zürich

Los coloridos tejidos de este artista sudamericano se extendieron con el calor…

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GaiaMotherTree Ernesto Neto
Foto: newlyswissed.com
GaiaMotherTree Ernesto Neto

Foto: newlyswissed.com

Los coloridos tejidos de este artista sudamericano se extendieron con el calor veraniego y tomaron una importante sección de la estación central de trenes en Zürich, donde fue inaugurada el pasado 30 de junio la instalación penetrable GaiaMotherTree, una colosal pieza de Ernesto Neto que fue presentada al público helvético por la Fondation Beyeler.

GaiaMotherTree Ernesto Neto

Foto: fondationbeyeler.ch

Un árbol colosal que extiende sus ramas en Suiza

Un equipo de 27 personas y más de 10 mil metros de tiras de algodón se encuentran detrás de esta instalación tejida y sustentable que, tal y como ocurre con la semblanza del gran árbol de la vida de la mitología nórdica, hace un símil con la existencia y nuestra conexión con la materia.

GaiaMotherTree remite a la divinidad griega Gaia, personificación de la tierra y por lo tanto, sinónimo de nacimiento, fertilidad y conexión con el elemento que nos sostiene como a su descendencia. El Jardín del Edén y los secretos del Árbol del conocimiento, están aquí plasmados como concepto inspiracional de Neto para emprender esta colosal recreación.

GaiaMotherTree Ernesto Neto

Foto: fondationbeyeler.ch

Reminiscencias a la tierra

Entre las virtudes del trabajo de Neto, podemos destacar la ingeniosa manera en la que la pieza ha sido colocada en la Zürich HB, sin agredir de ninguna manera los elementos arquitectónicos de esta estación de trenes con más de un siglo de historia, conocida por ser la más grande de Suiza.

Gracias a un eficaz sistema de contrapesos ingeniado por Neto, GaiaMotherTree se mantiene en pie. En la parte superior de la pieza, más de 400 kilos distribuidos en diversas especias (como cúrcuma, clavo de olor, pimienta negra y comino) y semillas de variadas procedencias, permiten que los tejidos se extiendan, describiendo una colorida cúpula inversa modular.

Abajo, en el suelo, la pieza está anclada a la superficie con más de 800 kilos de tierra. La instalación penetrable, que simula una columna bulbosa, de suaves transparencias físicas y cromáticas, permite que en su interior se hayan realizado, desde la fecha de su inauguración, diversas actividades culturales, como conciertos, recitales y sesiones de meditación.

Ernesto Neto magnifica su influencia Huni Kuin

Con más de 2.900 circulaciones a diario y permitiendo la convergencia de pasajeros provenientes de Alemania, Italia, Francia y Austria, la ubicación privilegiada de GaiaMotherTree en la Zürich HB sirve de gran visibilidad al trabajo del artista sudamericano, que en la actualidad desarrolla sus piezas sumergido en la esencia de la cultura Huni Kuin.

Desde hace unos cinco años, el artista brasileño trabaja muy en sintonía con las costumbres estéticas de esta comunidad indígena que habita la región amazónica de Brasil. La interpretación de mundo de los Huni Kuin, así como sus costumbres, cultura, tradiciones y producción artesanal, caló muy hondo en el trabajo de Neto, que expresa en GaiaMotherTree el súmmum de esta influencia.

GaiaMotherTree Ernesto Neto

Foto: fondationbeyeler.ch

Una reflexión orgánica

Detrás de las aromáticas especias que sostienen este gran árbol de la vida; más allá de las semillas que sirven de metáfora y contrapeso; mediante la instalación auspiciada por la Fondation Beyeler, Ernesto Neto invita a los centenares de transeúntes que circundan su instalación a hacer una reflexión sobre los recursos de la tierra y su uso consciente.

La obra está acompañada de un programa que invita a los usuarios frecuentes de la Zürich HB a traer consigo semillas, conchas secas de fruta y legumbres, para depositarlas a los pies del GaiaMotherTree, no solo para incrementar el contrapeso de la instalación, también para promover la conciencia ecológica.

GaiaMotherTree Ernesto Neto

Foto: fondationbeyeler.ch

Las semillas que integran la obra de Neto, serán distribuidas una vez que finalice la muestra, el próximo 29 de julio. Para el artista, estos pequeños núcleos de vida vegetal, simbolizan el ciclo de nuestra existencia y pretenden hacerse inmemoriales una vez que abandonen la estación central de Zürich y difundan vida en nuevas latitudes.